El deber ser…

Por Enrique Zavala Urquides.-El deber ser es todo lo ideal, todo lo idóneo dentro del derecho y la vida, pero sobre todo dentro de las conductas humanas y sociales, que nos guían hacia lo correcto.
Lo anterior en “el mundo real lo ideal no existe”, porque lo ideal sería perfecto, lo que nos caracteriza como seres humanos es esa imperfección, porque lo perfecto está reservado para un ser supremo y no depende del libre albedrío, son las característica que definen a Dios, por encima de los humanos, que a lo más que pudiéramos aspirar, es a su imagen y semejanza.
Ser?…
El SER es el gran reto, ya lo dijo el filósofo, “Ser o no ser, e allí el dilema”, este dilema conductual es lo que nos define como personas, como hombres y mujeres de bien, o todo lo contrario, diferencia a los MALOS de los buenos, diferencia a los que no respetan el Deber SER, de aquellos que viven con valores y actúan en consecuencia, lo cual se da en muy pocos políticos. (sic)
EL SER, es el gran reto, más aún en política y en el servicio público, porque en México en las últimas décadas, hemos vivido en el sector público principalmente, del dispendio, de los excesos, el robo, los atracos y la impunidad, a consecuencia de muchos y muchas sofistas, que son representados por esos pseudo servidores públicos, que sólo son “FALSOS POLITICOS”, que tanto daño hacen y han hecho al país y Sonora.
O parecer?…
Los falsos políticos sólo viven del engaño, de los atracos y desfalcos, de la demagogia, se alimentan de promesas incumplidas, son “faquires, bufones y viles ejecutores”, de graves acciones y políticas de Gobierno, fundamentadas en la mentira consuetudinaria y criminal, que le niegan a los ciudadanos de bien, “Un Gobierno del pueblo, para el pueblo y por el pueblo”, !solo parecen SER!… Son una total desgracia.
El solo parecer no sólo aplica al sector público, sino también al sector social y a la iniciativa privada (en gran medida privada, de iniciativa) , a los partidos y dirigentes políticos, a nosotros como ciudadanos, que no debemos vivir en la simulación, sino que debemos actuar para no permitirla, para denunciarla y se sancione, para, minimizar la gran IMPUNIDAD que alienta la CORRUPCIÓN y es parte de la gran simulación en México.
Conclusión
El deber ser es la clave, “el motor” para sacar de este círculo vicios a al país, . Obvio nos incluye a todos como sociedad, para enmendar el rumbo, “para dejar de parecer”, para dejar también de simular, yo pregunto, donde están esos líderes que impulsarán el cambio?, ¡busque, a su alrededor un solo verdadero líder!, yo francamente no los veo y esa es un gran limitante para aspirar al !DEBER SER!.
En este grave dilema del SER O NO SER, estamos implicados todas y todos los mexicanos,, presupone responsabilidad social y no apatía, implica compromiso comunitario, solidaridad y subsidiaria, es decir tomar nuestra parte de esas responsabilidades, para dejar de vivir (con todo respeto) como aquel “chero de la sierra que pedía e imploraba…. !Señor, hágase su voluntad en los bueyes de mi compadre! … !Ni más, ni menos!…
“Nunca tendrás un impacto en la sociedad, si no cambias primero tu persona ” (Nelson Mandela)

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