Por Javier Villegas Orpinela.-Mientras las autoridades mexicanas “echan las campanas al vuelo” en el pronóstico del PIB para el 2022, Estados Unidos pareciera que camina en sentido contrario al tomar con más cautela las estimaciones sobre la producción total.
Los economistas de ese país han empezado a rebajar sus perspectivas ante la rápida propagación de la variante Delta, el aumento de la inflación y los persistentes problemas de suministro.
Los analistas estdounidenses razuraron sus proyecciones de crecimiento epara el tercer trimestre al 5 por ciento, desde el 6.8 por ciento anterior, y recortaron su estimación para el cuarto trimestre al 5.3 por ciento, desde el 5.6 por ciento.
A nivel microeconómico la cosa se pone difícil ya que la confianza de los consumidores se ha visto afectada, lo que se ha reflejado en la disminución de los viajes aéreos, las reservas en restaurantes y las actividades de ocio.
De ahí que los especialistas apuntan que dado que las ventas minoristas también parecen haberse estancado, ahora se espera una contracción total del gasto de los consumidores en el tercer trimestre.
El caso es que el panorama económico se complica en Estads Unidos más sin embargo en México, que depende en un 80 por ciento del mercado estadounidense, las estimaciones oficiales “se han puesto de buen humor”.
De acuerdo al Paquete Económico que Hacienda acaba de entregar a los diputados de San Lázaro, México tendrá un buen 2022.
El nuevo titular de Hacienda, Rogelio Ramírez de la O, dijo que “en las cifras macroeconómicas, se prevé un crecimiento de 4.1 por ciento del PIB. El precio del barril del petróleo se calcula en 55.1 dólares, y se estima una plataforma de producción promedio de petróleo de un millón 826 mil barriles diarios.
“También, se espera una inflación al cierre de 3.4 por ciento, que considera la persistencia de los choques transitorios de la inflación y la postura monetaria del Banco de México”.
En la propuesta del Ejecutivo federal se consideró una tasa de interés promedio del 5 por ciento y un tipo de cambio de 20.3 pesos por dólar.
Para Ramírez de la O, el año próximo estará guiado por una recuperación económica que resolverá los retos asociados con la desigualdad a causa de la pandemia.
La autoridad hacendaria soporta el nuevo Paquete Económico en tres pilares: 1.- En los apoyos para el bienestar de la población más vulnerable; 2.- En la estabilidad y solidez de las finanzas públicas manteniendo la prudencia fiscal y 3.- En el apoyo a proyectos regionales de inversión que detonan el desarrollo social y tienen impactos en el bienestar y el empleo.
Además, se presume que el paquete económico contiene medidas en materia de equidad de género para sentar la bases para futuros paquetes y anunció apoyos para la economía de las mujeres que, reconoció, fue uno de los sectores más afectados por la pandemia.
Cierto que la esperanza muere al último, pero tampoco se debiera soñar y dibujar continuamente castillos en el aire. México y la inversión están distanciados en este Gobierno y mientras eso persista, el PIB azteca seguirá deprimido.
Twitter: @JvillegasJavier