Pecados de omisión

Por Enrique Zavala Urquides.- Los pecados de omisión son los mas graves, las omisiones por descuido, negligencia o intencionales son muy comunes en los tiempos que vivimos, por ello su gravedad, ya que ante las emergencias por ejemplo como el COVID, así como temas torales o eventos urgentes se cometen estos pecados que implican terribles consecuencias.

El ser omisos ante cualquier situación es deplorable, inhumano en muchos casos, injusto y peligroso en muchos otros, porque agravan las de por si difíciles situaciones que vivimos, este debería como sociedad ser un propósito en este año que comienza, para que evitemos esas perniciosas omisiones que tanto daño y deterioro causan.

En la religión y sociedad

En lo religioso es obvio que existen muchos tipos de pecados, los diez mandamientos los enuncian, existen también aquellos que son pecados capitales, pero el pecado de omisión es el mas grave de todos, porque depende de nosotros el actuar o no, de nuestro libre albedrio para actuar en consecuencia y lo mas grave de nuestra voluntad para hacerlo, o no.

En las problemáticas sociales estos pecados son muy comunes, ya que nos gana el individualismo, los egoísmos, los egos, la desidia, la indolencia o la simple apatía, las expresiones de “que lo resuelvan otros”, “ay se la echan”, “no es mi bronca”, “que flojera”, en fin, revestidas de una serie de antivalores que causas esos graves pecados de omisión…

En política y gobierno

Los pecados de omisión en la política, gobierno y servicio publico son mas graves aun, ya que las acciones u omisiones impactan a miles o a millones de ciudadanos, a quienes se les afecta con la inacción urgente ante las diversas problemáticas y necesidades, seguridad pública por ejemplo, muy en especial en temas que no requieren necesariamente de recursos económicos, sino que dependen de la simple “voluntad política” o buena fe.

Casos específicos de algunos pecados graves de omisión de ciertos políticos son, no cumplir las promesas de campaña, en muchos casos a propósito, porque solo se usó la demagogia para llegar al poder, o como los casos frecuentes de diputados, senadores o bancadas partidistas, que no hacen iniciativas en beneficio de los ciudadanos, o bien “congelan otras” para su propio beneficio, solo para “sacar raja política” o causar daño …

Conclusión

Por ello digo que un buen propósito de año nuevo es eliminar de nuestro comportamiento los pecados de omisión, que nosotros como ciudadanos actuemos con civilidad y conciencia social, en los políticos evitar la demagogia y en los servidores públicos actuar con la máxima diligencia, como se los exige la normatividad, ¡porque además las omisiones ya son delitos!…

Este es mi mejor deseo para usted en este año 2022, no ser omisos, para no ser víctimas de la apatía, que si todos lo cumpliéramos transformaríamos nuestra ciudad, nuestro Estado, nuestra sociedad, gobierno y nación, el solo NO SER OMISOS resuelve todas las problemáticas, porque nos obliga a ser diligentes, responsables, solidarios, subsidiarios, rectos y honestos, en corto nos convierte en buenas personas. ¡Ni más, ni menos!.

“Si hago una buena obra, me siento bien, y si obro mal, me encuentro mal. Esa es mi religión.”

Abraham Lincoln
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