Al final de cuentas la economía nacional termina el sexenio debilitada y los pronósticos de corto plazo así lo aseguran.
Tan complicada está la situación que “no se puede tapar el sol con un dedo” y hasta las dependencias del Gobierno federal se suman a los cálculos que hacen los departamentos de análisis económico del sector privado.
De acuerdo con el Consejo de Estabilidad del Sistema Financiero, integrado por el secretario de Hacienda y la Gobernadora del Banco de México, en la economía mexicana persiste la expectativa de un crecimiento moderado para este año y el desafió de una elevada incertidumbre por factores externos, pero también internos, por el marco institucional y la consolidación fiscal.
Al actualizar su balance de riesgos, las autoridades del Consejo están obligadas a permenecer atentas y vigilantes al comportamiento de los mercados para, en caso necesario, tomar las medidas que se requieran para salvaguardar la estabilidad del sistema financiero mexicano.
Las autoridades reconocen que los mercados financieros a nivel global registran episodios agudos de volatilidad e incertidumbre, principalmente asociados con la publicación de datos de empleo, actividad económica e inflación en EU.
También han influido eventos en distintas jurisdicciones en los ámbitos monetario, electoral, geopolítico e, incluso, de las tecnologías de la información.
Los mercados financieros en México se han visto afectados por momentos de volatilidad e incertidumbre registrados a nivel internacional, pero también se ha sumado un mayor sentimiento de aversión al riesgo asociado con factores ideológicos.
Desde la última sesión del Consejo (el pasado 28 de junio), el peso mexicano acumula una depreciación cercana a 8 por ciento con respecto al dólar estadounidense.
Si bien la calificación crediticia soberana se mantiene en grado de inversión y con una perspectiva estable, algunas de las principales agencias calificadoras han reiterado en comunicaciones recientes algunos desafíos relevantes en aspectos relacionados con, entre otros, el marco institucional, el clima de negocios, la consolidación fiscal y las perspectivas de crecimiento económico del País.
Por si fuera poco, la percepción sobre la calidad crediticia de Pemex continúa enfrentando retos, aunque sus calificaciones, al igual que sus perspectivas, se mantuvieron sin cambios por parte de las principales agencias en el tercer trimestre de este año.
El Consejo revisa la exposición del sector externo en activos denominados en pesos, que ha disminuido en lo que va del 2024, sobre todo en los valores de renta variable.
El Consejo de Estabilidad del Sistema Financiero también la integran: El subsecretario de Hacienda y Crédito Público, dos subgobernadores de Banxico, el presidente de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores, el presidente de la Comisión Nacional de Seguros y Fianzas, el presidente de la Comisión Nacional del Sistema de Ahorro para el Retiro y el secretario ejecutivo del Instituto para la Protección al Ahorro Bancario.
En suma, el sexenio de López Obrador concluirá creciendo anualmente apenas 0.9 por ciento, en lugar del 4 por ciento prometido.
Todo esto obedece a que la 4T siempre mantuvo a raya al sector productivo y a los representantes camarales.
El sello fue la división y consecuentemente la escasez inversora. Claudia Sheinbaum recibe una economía diezmada y un País con profundas heridas..
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