Ganado mexicano se queda en casa
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Revista CorreoFecha de publicación

Tras la suspensión del ingreso de ganado mexicano a Estados Unidos, decretada en julio por motivos sanitarios, productores nacionales han comenzado a colocar su producto en el mercado interno, aun cuando esto implique una reducción en sus ingresos.
El gobierno estadounidense decidió cerrar temporalmente la frontera al ganado mexicano para prevenir la llegada del gusano barrenador, una larva parasitaria que se alimenta de tejido vivo en los mamíferos. La decisión coincidió con un periodo de tensiones diplomáticas entre ambos países derivadas de los temas migratorios, de seguridad y comercio impulsados por la administración de Donald Trump.
“Ya se está empezando a vender en México”, explicó Rogelio Pérez, integrante de la Asociación Mexicana de Productores de Carne (Ameg). El especialista reconoció que aunque el mercado estadounidense es más rentable, los productores están adaptándose a las condiciones locales:
“Les va mejor en Estados Unidos, pero sí se está empezando a vender en México, a un precio más bajo porque el mercado nacional tiene otro tipo de precios”, señaló.
Pérez agregó que, por ahora, no existe una fecha definida para la reanudación de las exportaciones:
“Es un tema que sigue avanzando y en el cual todavía no tenemos una definición de cuándo vamos a empezar a exportar ganado”.
La Presidenta Claudia Sheinbaum calificó la medida de “exagerada”, argumentando que México ha tomado acciones concretas para contener la plaga. Entre ellas, el uso de ivermectina —un antiparasitario aplicado al ganado infectado— y la liberación de moscas estériles para reducir la reproducción del gusano barrenador en los campos afectados.
No obstante, a finales de septiembre se detectó un nuevo caso en Nuevo León, cerca de la frontera con Estados Unidos, lo que reavivó las alertas sanitarias.
Pese a ello, la secretaria de Agricultura estadounidense, Brooke Rollins, informó recientemente en la red social X que no se han registrado nuevos casos en los estados mexicanos fronterizos durante la última semana, un dato que genera optimismo en el sector ganadero ante una posible reapertura del mercado estadounidense.