Nueva Ley Antilavado

Autor

Revista Correo

Fecha de publicación

Imagen de la noticia

La lucha contra el lavado de dinero en México subió de nivel. Con el impulso de la Presidenta Claudia Sheinbaum y tras presiones internacionales como los señalamientos del Departamento del Tesoro de EE.UU., se aprobó una reforma clave a la Ley Federal para la Prevención e Identificación de Operaciones con Recursos de Procedencia Ilícita, mejor conocida como Ley Antilavado.

La reforma busca blindar a México frente a operaciones ilícitas, reforzando la actuación de la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) y alineando al País con estándares globales. Pero no llega sin controversia: mientras el Gobierno celebra un paso firme contra el crimen financiero, organizaciones civiles y sectores empresariales advierten de posibles riesgos y costos.

Aquí te presentamos 8 claves para entender esta reforma:

1. México en línea con el Gafi

El cambio responde a recomendaciones del Grupo de Acción Financiera Internacional (Gafi), buscando que México cumpla con estándares internacionales para prevenir el lavado de dinero y el financiamiento al terrorismo.

2. Registro de Personas Políticamente Expuestas

Se crea un registro obligatorio de Personas Políticamente Expuestas (PEPs), las cuales son figuras públicas con influencia política, así como de sus familiares y personas cercanas. Su monitoreo será obligatorio para prevenir el uso indebido de recursos.

3. ¿Quién está detrás del dinero?

La reforma obliga a identificar al beneficiario controlador, quien realmente controla o se beneficia de una operación financiera, incluso si lo hace a través de terceros o estructuras legales.

4. Tecnología al servicio de la vigilancia

Las instituciones deberán implementar sistemas automatizados para detectar operaciones sospechosas en tiempo real, hacer análisis de riesgo y realizar auditorías internas periódicas.

5. Reportes más estrictos y digitales

Los umbrales para reportar operaciones en efectivo o con tarjetas prepagadas serán más bajos. Además, todos los trámites se harán en una sola plataforma digital con tiempos claros de respuesta.

6. Coordinación total

La UIF podrá coordinarse de forma más directa con la Fiscalía General, la Guardia Nacional, el INE, Pemex y hasta sindicatos o partidos. Todos deberán reportar actividades sospechosas.

7. Criptomonedas y más, bajo la lupa

Se amplía el catálogo de actividades consideradas vulnerables. Por ejemplo, desarrollos inmobiliarios, fideicomisos y negocios con criptomonedas deberán identificar beneficiarios y reportar operaciones sospechosas, incluso si no se concretan.

8. UIF con voz en los tribunales

La Unidad de Inteligencia Financiera podrá ser reconocida como víctima en procesos penales por delitos financieros, lo que le permitirá intervenir directamente para recuperar activos.

En un contexto global donde el dinero ilícito fluye con más velocidad que nunca, sobre todo a través de plataformas digitales y activos virtuales, la reforma a la Ley Antilavado busca que México no se quede atrás en la carrera por proteger su sistema financiero. El reto será lograrlo sin frenar la actividad económica ni vulnerar derechos fundamentales.