Los juzgadores de primera instancia por ser los primeros respondientes judiciales ante nuestras demandas y quejas deben de brindar justicia !bien y a la primera!, para hacer justicia pronta y expedita.
En la práctica hay muchos que “patean el bote”, quienes por intereses muy particulares, ignorancia, ineptitud y corrupción, afectan y destruyen reputaciones, patrimonios, afectando a personas de forma por demás impune, a continuación analizare a dos tipos de juzgadores y citaré sus nombres por constarme personalmente.
Los malos juzgadores
En primera instancia los hay de muchos tipos, desde aquellos que abusan de su poder por “compadrazgos”, amiguismos, ineptitud y muy comúnmente por intereses y corrupción, a pesar de tener pruebas favorables, al quejoso, por lo anterior dictan sentencias en contrario, dejándonos en la indefensión total al obligar a un innecesaria y costosa segunda instancia.
Hace algunos años, un juzgador después de demostrarle con “pruebas reynas” la claridad de una prescripción y pedirle dictará sentencia favorable me contestó cínicamente, “si Lic. pero eso no conviene, ay me lo ganas en el amparo”…. Se trató del Juez segundo de lo mercantil de Hermosillo Jesús Rogelio Olivares Abril, quien para mi sorpresa después de este incidente y otros inexplicablemente fue !promovido a magistrado del Supremo Tribunal de justicia de Sonora!.... No cabe duda, por eso estamos como estamos…
Los buenos juzgadores
También hay que contar lo bueno, este es el caso de una excelente mujer, joven, humanista, preparada, atenta y dedicada a su trabajo de juzgadora, me refiero a la juez “A” del Juzgado SEGUNDO de lo Familiar de Hermosillo, Licenciada Yanira Lourdes Sánchez Lugo, Además de todo lo anterior es una excelente persona con una extraordinaria empatía.
Ella como juez conoció un juicio de divorcio donde se violaron muchos temas de género, con aristas de violencia familiar, incumplimiento de obligaciones por el ex cónyuge varón, en corto hizo una resolución del caso no sólo apegada a derecho, sino con abundante soporte jurisprudencial y/o antecedentes jurídicos, profesionales, concatenados hermenéuticamente, debidamente fundados y motivados, dignos de un erudito en Derecho.
Conclusión
El caso del mal juez Jesús Rogelio Olivares Abril queda como una testimonial de lo que !NO DEBE DE HACER ningún juez!, porque eso denigra no sólo al servicio publico sino que suma a la mala reputación de este tipo de juzgadores, quienes llegan a estos puestos, por favores y privilegios políticos, !no por sus méritos como juristas!....
Por el contrario, el caso de la juez y Licenciada Yanira Lourdes Sánchez Lugo, nos da esperanzas para transformar el sistema judicial mexicano, con gente comprometida, con verdaderos servidores públicos de carrera y no encumbrar como jueces o magistrados !A recomendados, escombro político, o a serviles e incondicionales qué reciben favores por sus servicios al partido! ….. ¡Ni más, ni menos!
“NO hay en verdad, espectáculo más odioso, qué el de los talentos serviles” (José Martí)
